Bienvenidas y bienvenidos a un nuevo programa de ‘Sanará Mañana’. Hoy, desde los micrófonos de Frecuencia Enfermera, hablamos de salud comunitaria, concretamente de la ‘Detección y prevención de factores determinantes de la salud en el ámbito comunitario’.
Para ello, tenemos con nosotros, vía telefónica, a Isabel Clavería, enfermera de la Unidad de Salud Internacional Drassanes-Vall d’Hebron, que nos atiende desde Barcelona. Ella trabaja en el ámbito de la salud tropical e internacional, y atiende a poblaciones inmigrantes de países tropicales y subtropicales desde la parte asistencial y comunitaria.
La OMS define a los determinantes sociales como aquellas circunstancias en las que las personas nacen, crecen, viven, trabajan y envejecen, e incluso al sistema sanitario de salud al que pueden acceder. Isabel nos explica que estas circunstancias «son el resultado de la distribución del dinero, del poder y los recursos a nivel mundial, nacional y local. También depende de las políticas adoptadas en cada país». La desigualdad en la distribución de estos determinantes da como resultado «la aparición de desigualdades sociales en salud, que son las diferencias en salud injustas, sistemáticas y evitables», nos cuenta.
Existen muchos ejemplos de desigualdades a distintos niveles, por ejemplo, «en España, podríamos hablar de que la esperanza de vida al nacer es superior según en qué comunidad autonómica se nazca. Es por ello que la enfermera juega un papel muy importante e imprescindible. Nuestra intervención debe ser a través del abordaje psicosocial y el empoderamiento de las personas».
No cabe duda de que la gran parte de las políticas de intervención que se están llevando a cabo en nuestro país funcionan, matiza Isabel. Sin embargo, hay muchos sectores de la población que no se benefician de ellas. Eso aumenta la brecha en la desigualdad en salud. «Creo que hay que intervenir más para reducirlas, incidiendo en las condiciones de vida y trabajo de las personas. España es uno de los países europeos que menos invierte en Sanidad. Podemos guardar lo que se hace bien, pero hay que modificar o adquirir lo que no se está haciendo».
Isabel cree que la atención primaria tiene un camino lleno de oportunidades para ser un potencial de cambio. «Tenemos la necesidad de dar respuestas eficientes y equitativas a la población. Hay que establecer vínculos con los tejidos asociativos de la comunidad, ya que determinantes de salud como el envejecimiento progresivo o la movilidad y las nuevas tecnologías precisan de servicios integrados». Sobre todo, incide, es necesaria una implicación y una participación política. «Es una fórmula: implicación y participación política + implicación y participación profesional + implicación y participación de la ciudadanía. Esta última nos dará una visión de cómo está la comunidad».
Otra de las claves para tumbar muros es «potenciar el papel de la enfermera comunitaria». No obstante, para ello, «hay que empezar por aumentar el ratio enfermera-habitante. Creo que no llegamos ni a una enfermera por cada 1.000 habitantes en los equipos de atención primaria. Con esas cifras, milagros…».
Isabel recuerda que, tras la ola de COVID-19, se está hablando del perfil de la Enfermera de Práctica Avanzada (EPA) y que «estaría bien reconocer el perfil de esta enfermera en catástrofes sanitarias». Potenciar, reconocer y fomentar el perfil de la EPA en este sentido «encajaría perfectamente en lo que hemos vivido».
Si quieres saber más sobre determinantes de salud en el ámbito comunitario, dale al play y escucha la entrevista completa con Isabel Clavería en este episodio 109 de ‘Sanará Mañana’.
Salud mental y prevención de adicciones, en ‘Sanará Mañana’