Historia de un maniquí, en ‘Saliente de guardia’
Estamos en 1911, donde Edwin A Link prueba simuladores de vuelo para el entrenamiento de pilotos, y los comercializa con el nombre de Blue Box o Link Trainer. Esta tecnología sirvió de inspiración y de pilar fundamental para el desarrollo de la simulación en el ámbito clínico. Fue el inicio de la historia de un maniquí. Sin embargo, aún tenemos que remontarnos mucho más atrás. Nuestra primera parada del viaje será la India. En el siglo III a.C., Susruta recomendaba a sus alumnos usar un melón para hacer incisiones o, en otras ocasiones, utilizaba una muñeca de lino a tamaño natural para hacer vendajes. ¡Pero esperad! Ahora, tenemos que coger un vuelo a París. En concreto, al siglo VIII, donde Grégoire desarrolló un maniquí obstétrico de pelvis humana. A este maniquí, le otorgan el nombre de ‘El Fantasma’, sirviendo, desde ese momento, a obstetras a reducir la tasa de mortalidad materna e infantil.